La tecnología adaptativa de Shell Rimula presta una destacada protección contra el desgaste y mejora el consumo de combustible gracias a su menor viscosidad.


Beneficios de los productos Shell Rimula

 

Protección contra los ácidos

Los ácidos de la combustión pueden penetrar en el cárter del motor. Con lubricantes de poca calidad, los componentes vitales pueden quedar expuestos a esos ácidos, con el consiguiente riesgo de corrosión y de catastróficas averías del motor.

Los lubricantes Shell Rimula contienen potentes antioxidantes que se adaptan químicamente para neutralizar los ácidos antes de que puedan causar daños en el lubricante y el motor.

Protección contra los depósitos 

Ya sean depósitos en los pistones o lodos en el cárter, la suciedad del motor puede reducir su eficiencia e incrementar el gasto de combustible. Los lubricantes para motores diésel Shell Rimula contienen moléculas que se adaptan para arrastrar y bloquear las partículas que tienden a depositarse, lo que facilita que los motores se mantengan limpios y protegidos.

Control del desgaste 

La protección frente al desgaste es un aspecto especialmente crítico en los puntos de contacto con alta presión, como el tren de válvulas del motor o la caja de cambios. Los lubricantes para motores diésel Shell Rimula tienen moléculas adaptables diseñadas para proteger el motor reaccionando al calor y la presión para formar una película protectora que contribuya a reducir el desgaste.